Algunas de las entidades castigadas han sido la aseguradora Cóndor, la Fiduciaria Corficolombiana, Bancolombia y Davivienda.
Casos como el de Interbolsa son un claro ejemplo de que al final no estamos del todo protegidos.
La protección del inversionista es fundamental para que aumenten las inversiones de manera que la liquidez este garantizada, de hecho, el nivel de confianza en una nación condiciona su bienestar. Una mayor protección favorece una mayor financiación externa y más barata. También evita la apropiación por inversores informados de los derechos de minoristas y favorece la canalización del ahorro como fuente de financiación empresarial. A pesar de que podamos no sentirnos protegidos en ocasiones, según el Banco Mundial, Colombia es hoy el primer país en América Latina en protección al inversionista y el quinto a nivel mundial, así que creo que los datos son más que positivos.
Los organismos con los que cuentan los inversionistas son:
El Defensor del Cliente: Las sociedades comisionistas de Bolsa tienen un vocero con el objetivo de resolver de forma objetiva, independiente y gratuita las quejas individuales.
El Autorregulador del Mercado de Valores (AMV) que se encarga de verificar el cumplimiento y poner sanciones por el incumplimiento de las normas del mercado de valores.
La Superintendencia Financiera que supervisa el sistema financiero colombiano para preservar su estabilidad, seguridad y confianza. También se encarga de promover, organizar y desarrollar el mercado de valores colombiano y la protección de los inversionistas, ahorradores y asegurados.