En la bolsa, una empresa puede decidir aumentar su dividendo por diferentes motivos. Ya que el dividendo representa una parte de las ganancias que se destinan a los accionistas, un incremento suele percibirse como una señal positiva, porque refleja la confianza de la empresa en su futuro.
Aunque no todo es color de rosa, porque en algunos casos, un aumento en el dividendo podría indicar que la empresa tiene pocas oportunidades de expansión y prefiere, en lugar de reinvertir, repartir el exceso de liquidez entre los accionistas.
Por eso, en las siguientes líneas reflexionaremos sobre esta idea que abre el artículo.
¿Qué impulsa a una empresa a aumentar los dividendos?
Una empresa puede decidir incrementar sus dividendos por varias razones, y estas decisiones suelen estar influenciadas tanto por factores internos como externos. Aquí te explico las principales:
- Confianza en la salud financiera y el crecimiento futuro: Este es, sin duda, el motivo principal por el que una empresa debería aumentar sus dividendos de forma genuina. No solo está segura de su buena situación actual, sino que también confía en su crecimiento a futuro, por lo que decide compartir parte de esos beneficios con sus inversionistas.
- Señal positiva para los accionistas: Un aumento en los dividendos es una manera de demostrar confianza en la estabilidad financiera de la compañía y en sus perspectivas de crecimiento. Esto puede atraer nuevos inversionistas y mantener contentos a los que ya tienen acciones.
- Flujos de caja sólidos: Cuando una empresa tiene ingresos constantes y predecibles, puede destinar una mayor parte de sus utilidades a los accionistas sin afectar su operación.
- Falta de oportunidades de reinversión: Este es otro motivo común para incrementar los dividendos: la falta de proyectos atractivos para expandirse o reinvertir. En estos casos, la empresa opta por repartir una mayor parte de sus utilidades a los accionistas. Este fenómeno es frecuente en empresas del sector energético o en compañías consolidadas, como las de consumo masivo con trayectoria.
- Competencia y atractivo para los inversionistas: Algunas compañías aumentan sus dividendos como estrategia para resultar más atractivas a los inversionistas, especialmente aquellos que buscan ingresos recurrentes. Sin embargo, esta práctica puede ser riesgosa a largo plazo, ya que podría limitar los fondos para reinversiones necesarias.
- Beneficios fiscales o regulaciones: En ciertos contextos, es más conveniente desde el punto de vista tributario distribuir utilidades en forma de dividendos que mantenerlas como reservas o reinvertirlas.
Ejemplos de empresas que han aumentado los dividendos
A nivel mundial, hay muchas empresas que, con el tiempo, han incrementado de manera constante los dividendos que ofrecen por acción. Tanto es así que, gracias a este fenómeno, se ha desarrollado una estrategia de inversión conocida como dividendos crecientes (DGI, por sus siglas en inglés).
En Estados Unidos, por ejemplo, existe un enfoque muy fuerte en el crecimiento sostenido de los dividendos. De hecho, hay dos grupos reconocidos que reúnen a las empresas líderes en este aspecto: los "Aristócratas del dividendo" y los "Reyes del dividendo".
Es posible que en la siguiente lista reconozcas nombres de empresas cuyos productos incluso hayas consumido en algún momento:
Es posible que en la siguiente lista reconozcas nombres de empresas cuyos productos incluso hayas consumido en algún momento:
Compañía | Sector | Años con incremento de dividendos | Crecimiento anualizado de dividendos en 3 años |
---|---|---|---|
Genuine Parts (GPC) | Bienes de consumo | 69 años | 6.34% |
Procter & Gamble (PG) | Bienes de consumo | 69 años | 6.21% |
Emerson Electric (EMR) | Industrial | 68 años | 1.31% |
Coca-Cola (KO) | Bienes de consumo | 63 años | 3.91% |
Johnson & Johnson (JNJ) | Salud | 63 años | 5.70% |
Kenvue (KVUE) | Bienes de consumo | 61 años | - |
Colgate-Palmolive (CL) | Bienes de consumo | 62 años | 2.96% |
¿Cuáles son las 3 decisiones o políticas empresariales sobre dividendos?
Para distribuir dividendos, las empresas generalmente utilizan los fondos de caja disponibles. Por esta razón, las políticas de dividendos enfrentan tres decisiones principales, que dependen del contexto y de la etapa en la que se encuentre el negocio:
- Dividendos irrelevantes: Es la decisión de no repartir dividendos a los accionistas. A menos que se trate de empresas en constante crecimiento o innovación, esta política no suele ser bien recibida por el mercado. Sin embargo, en la práctica, cada empresa sigue alguna política de dividendos acorde a su situación.
- Estabilidad de los dividendos: Mantener dividendos constantes y regulares en el tiempo es la política preferida tanto por los directivos como por los inversionistas. Los accionistas valoran esta estabilidad, que suele ser más atractiva que los dividendos fluctuantes. Por eso, existe una estrategia de inversión diseñada para aprovechar esta constancia: la conocida como Dividend Value Strategy.
- Política de dividendos crecientes: Adoptada por empresas que buscan fidelizar a sus accionistas, esta política refleja estabilidad financiera y confianza en el futuro. A veces, también se le llama una política de dividendos fluctuantes, ya que si las perspectivas cambian, las empresas se reservan el derecho de disminuir o suspender el pago de dividendos.
Por ejemplo, esto fue lo que sucedió con Inditex en 2022, cuando se retiró del mercado ruso debido al impacto económico de la falta de ingresos provenientes de ese país. No obstante, desde entonces, la empresa fundada por Amancio Ortega ha retomado su política habitual de dividendos gracias a los buenos resultados obtenidos en otros mercados.
¿Cuál es el efecto del dividendo en el valor de las acciones?
El efecto más común de los dividendos sobre el valor de las acciones es una disminución en su precio de cotización, equivalente al valor del dividendo por acción que se transfiere al accionista.
¿Cuándo un aumento de dividendos no es sostenible?
La sostenibilidad de los dividendos es un factor clave para los inversionistas que buscan ingresos recurrentes. Refleja la capacidad de una empresa para mantener los dividendos de forma constante a lo largo del tiempo, sin recurrir a medidas esporádicas o insostenibles.
Las empresas que logran aumentar sus dividendos de manera consistente a lo largo de diferentes ciclos de mercado suelen tener una ventaja competitiva y un crecimiento sólido. Sin embargo, basar una estrategia de inversión únicamente en el rendimiento por dividendo puede exponer al portafolio al riesgo de recortes.
Por ejemplo, si una empresa enfrenta años con ganancias inferiores a lo esperado, podría verse obligada a reducir o eliminar los dividendos para proteger su estabilidad financiera. De no hacerlo, y si decide mantener o incrementar los dividendos, podría incurrir en prácticas desfavorables para los accionistas, tales como:
- Vaciar las reservas de caja: Aunque puede hacerse de manera excepcional en un año complicado, no es sostenible a largo plazo.
- Emitir nuevas acciones: Usar el capital entrante para pagar dividendos a los accionistas existentes, lo cual diluye el valor de las acciones actuales. Un ejemplo fue el Banco Santander, que durante años emitió nuevas acciones para pagar dividendos, generando dilución en sus accionistas.
- Solicitar deuda: En el peor de los casos, pedir préstamos para mantener el pago de dividendos, comprometiendo la salud financiera de la empresa a futuro.
Un ejemplo reciente: Intel
Esto fue exactamente lo que ocurrió hace poco con Intel (INTL). Mira cómo reaccionó el mercado frente a una mala política de dividendos: en cuestión de unas pocas sesiones, la acción perdió cerca del 40% de su valor, y meses después, todavía no ha logrado recuperarse (de hecho, sigue lejos de los niveles anteriores).
Caída de casi el 40% en la cotización de Intel por una mala política de dividendos
¿Cuáles son los dos principales parámetros para evaluar si los dividendos han ido en aumento?
Existen dos indicadores clave que los inversionistas utilizan para analizar tanto el potencial de una empresa como su atractivo para quienes buscan ingresos estables:
- La rentabilidad por dividendo: Este porcentaje es uno de los indicadores más populares entre los pequeños inversionistas. Se calcula dividiendo el dividendo anual por acción entre el precio actual de la acción. En otras palabras, nos muestra qué porcentaje del precio de la acción se paga en forma de dividendo.
- El payout ratio: Sin duda, es uno de los ratios más utilizados por los inversionistas, ya que mide qué tan sólida es una empresa desde el punto de vista financiero y su capacidad para generar beneficios estables a lo largo del tiempo (y distribuirlos). Muchos analistas prefieren este ratio frente a la rentabilidad por dividendo, ya que la rentabilidad está más expuesta a las fluctuaciones del mercado y podría no ser sostenible a largo plazo.
Ambos indicadores son herramientas valiosas para evaluar cómo han evolucionado los dividendos de una compañía y determinar si estos han crecido de manera constante a lo largo del tiempo.
En resumen, las razones detrás de un aumento en los dividendos pueden ser varias. Como inversionistas, nuestra tarea es identificar cuáles son: si se trata de una empresa que ya alcanzó un nivel de madurez y busca retener a sus accionistas a través de dividendos, o si simplemente está intentando mantenerlos a toda costa.