Invertir en inteligencia artificial ha copado la escena durante los últimos 6 meses, con compañías como Nvidia presentando un rendimiento en bolsa de 3 dígitos.
Los estudios y encuestas recientes revelan que la adopción de esta nueva tecnología se ha convertido en una prioridad en el ámbito de la empresa.
Todos quieren incorporar las nuevas herramientas a sus modelos de negocio y demás procesos para ser mucho más productivos y agregar más valor.
No podemos ignorar esta macro-tendencia en desarrollo y es por eso que te presentamos sus aspectos fundamentales y las principales acciones y ETFs para invertir en inteligencia artificial.
¿Qué es la Inteligencia Artificial?
La Inteligencia Artificial (IA) se refiere a la simulación de procesos asociados con la inteligencia humana por parte de máquinas, abarcando tareas como aprendizaje, razonamiento, resolución de problemas, percepción y reconocimiento de voz, entre muchas otras.
La capacidad de la IA para aprender y adaptarse continuamente la convertirá en una herramienta valiosa en diversos campos, como la atención sanitaria, las finanzas, la automoción y la ciberseguridad, para solo nombrar algunos.
El gran potencial de esta tecnología se halla en la capacidad de ejecutar tareas y obtener resultados de forma mucho más rápida que un ser humano. ¡Imagina cuánto podría avanzar la productividad del trabajo al cabo de unos pocos años con la IA!
Es por esto que invertir en inteligencia artificial se ha convertido en una prioridad para las empresas. Y también para los inversores… Veamos el gráfico semanal de las acciones de Nvidia entre 2021 y 2024: Nvidia: Gráfico Semanal 2021-2024
Entre mediados de octubre de 2023 y finales de febrero de 2024 las acciones de Nvidia han aumentado un sorprendente 614,4%. Esta compañía ha capitalizado toda la euforia inicial de la IA y ya se valora en más de 2 trillones de dólares, solo por detrás de Microsoft y Apple.
Sin embargo, de la misma forma en que la IA está comenzando a transformar nuestras vidas a una velocidad vertiginosa, también supone grandes riesgos y desafíos éticos. Se cree que su impacto podría ir mucho más allá de lo que resultaría conveniente.
De momento, todas las compañías, grandes o pequeñas, se preparan para intentar aprovechar esta disruptiva tecnología de una forma que les permita generar cada vez más valor para sus accionistas.
Principales áreas de la inteligencia artificial
La inteligencia humana se expresa en múltiples formas, por lo que la IA, que la intenta replicar, también comprende aplicaciones muy diversas.
En general, la IA se divide en 2 grandes campos: la IA restringida (narrow AI) y la IA general.
Inteligencia Artificial Restringida
Está diseñada para realizar una tarea específica o un conjunto de tareas de manera efectiva y dentro de un alcance limitado.
Los ejemplos incluyen reconocimiento de voz, reconocimiento de imágenes y sistemas de recomendación.
Inteligencia Artificial General
Su objetivo es comprender, aprender y aplicar conocimientos en una amplia gama de tareas, imitando las capacidades cognitivas humanas. Además, puede adaptarse a diferentes situaciones sin programación específica.
Los campos relacionados con la IA general incluyen robótica, vehículos autónomos y sistemas de toma de decisiones estratégicas.
Principales aplicaciones de la IA
En este momento son 3 los principales campos de aplicación de la IA y, como veremos, según el enfoque utilizado pueden abarcar tanto la IA restringida como la IA general:
Aprendizaje Automático (Machine Learning)
El aprendizaje automático se basa en algoritmos que aprenden de los datos sin necesidad de una programación explícita, lo cual, permite a las computadoras identificar patrones y hacer predicciones.
Por ejemplo, estos algoritmos impulsan los motores de búsqueda en plataformas de comercio electrónico y de entretenimiento, sugiriendo productos o contenidos basados en nuestras decisiones anteriores.
Procesamiento del Lenguaje Natural (Natural Language Processing)
Este campo permite que las máquinas comprendan y procesen el lenguaje humano.
Sus aplicaciones incluyen chatbots que responden a las consultas de los clientes y herramientas de análisis de sentimientos que intentan medir la opinión pública en las redes sociales.
Visión por Computadora (Computer Vision)
La visión por computadora equipa a las máquinas con la capacidad de interpretar y analizar información visual.
Sus aplicaciones incluyen software de reconocimiento facial y automóviles autónomos que navegan por las carreteras utilizando cámaras y sensores.
Como puedes ver, las aplicaciones descritas tienen un amplio alcance y supondrán grandes oportunidades para invertir en inteligencia artificial: Encuesta Sobre Tecnologías Emergentes
De acuerdo con la Encuesta Sobre Tecnologías Emergentes 2023 realizada por la reconocida firma PwC, de un total de 1.026 ejecutivos comerciales y tecnológicos consultados en Estados Unidos, provenientes de empresas de todos los sectores con al menos 500 millones de dólares en ingresos, el 58% afirmó que sus compañías invirtieron en IA en los últimos 12 meses, siendo su principal prioridad de inversión.
Historia de la Inteligencia Artificial
El concepto de inteligencia artificial tiene su origen en ideas que se remontan a la antigüedad, aunque los avances más significativos comenzaron a mediados del siglo XX.
Todo nació de una propuesta para un proyecto de investigación de verano sobre inteligencia artificial, redactado en agosto de 1955 y encabezado por John McCarthy en Dartmouth College (New Hampshire, Estados Unidos).
Junto a McCarthy también participaron Marvin Minsky, Nathaniel Rochester y Claude Shannon.
A esta propuesta se le atribuye haber acuñado el término “inteligencia artificial” y haber sentado las bases para otro proyecto de investigación desarrollado un año más tarde, el cual supuso el nacimiento de la IA como campo.
Durante las décadas siguientes, la IA ha sido testigo de avances en redes neuronales, aprendizaje profundo y aprendizaje por refuerzo, lo que ha impulsado su aplicación en diversas industrias.
Se cree que 2 de las claves centrales para estos avances radican en el tremendo aumento del poder computacional que hemos presenciado y en la gran disponibilidad de bases de datos.
¿Cómo invertir en inteligencia artificial?
Hay varias formas de invertir en inteligencia artificial, aunque los 2 enfoques más populares son los siguientes:
Invertir en acciones de inteligencia artificial
Puedes invertir directamente en las compañías que se hallan en la vanguardia del desarrollo de la IA.
Esto requiere una investigación pormenorizada para identificar empresas con sólidas capacidades de IA, una clara ventaja competitiva y un historial de innovación.
Además, recuerda que dentro de las alternativas disponibles hay acciones de dividendo de empresas ya establecidas cuyo crecimiento es más lento, así como acciones de crecimiento, cuya apreciación en bolsa puede ser más rápida.
Algunos ejemplos de las empresas más representativas que han incursionado en el campo de la IA incluyen:
Nvidia (NASDAQ: NVDA), líder en unidades de procesamiento de gráficos (GPU) cruciales para aplicaciones de IA. Todas las compañías que quieren desarrollar modelos de IA están comprando los equipos de Nvidia por centenas de miles, ya que se requiere un enorme poder computacional. De manera que sus equipos y componentes para IA están teniendo una demanda récord.
Alphabet (NASDAQ: GOOG/GOOGL), la empresa matriz de Google, invierte fuertemente en investigación de IA y ya posee su propia herramienta de IA generativa, Gemini. De hecho, la compañía planea aumentar sus gastos de capital en este campo y espera lanzar Gemini Ultra este mismo año, aunque se le considera algo rezagada con respecto a sus competidores, teniendo que retirar su primera herramienta, Bard, por fallas.
Microsoft (NASDAQ: MSFT), con sus inversiones estratégicas en IA ha generado ingresos récord de 62 mil millones de dólares en el trimestre culminado en diciembre de 2023, posicionándose como uno de los líderes en el espacio de IA generativa. Su asociación con OpenAI y los servicios habilitados para IA han impulsado sus ofertas en la nube, así como otras herramientas (Bing, Copilot).
Meta Platforms (NASDAQ: META), que según las propias palabras de Mark Zuckerberg, ha entrado en la carrera para desarrollar una Inteligencia Artificial General y ya ha desarrollado un gran modelo de lenguaje llamado “Llama 2”. Se estima que, para finales de este año, Meta poseerá al menos unas 340.000 GPU H100 de Nvidia, las cuales son necesarias para entrenar a los grandes modelos que requiere la IA.
Advanced Micro Devices (NASDAQ: AMD), un fabricante de microprocesadores que ha presentado su última arquitectura Embedded+, la cual integra las capacidades de sus procesadores más avanzados con IA para potenciar el poder computacional y la eficiencia energética de sus productos.
ROBO Global Robotics and Automation Index ETF (NYSE: ROBO).
iShares Robotics and Artificial Intelligence ETF (NYSE: IRBO).
First Trust Nasdaq Artificial Intelligence ETF (NASDAQ: ROBT).
Todos estos ETF invierten en IA, robótica y otros desarrollos industriales relacionados por medio de la compra de decenas de acciones de compañías ubicadas en distintos sectores.
Antes de comprar un ETF debes tener muy claro a cuánto asciende la comisión de gastos de administración y de qué tipo de ETF se trata (de distribución, de acumulación).
¿Vale la pena invertir en inteligencia artificial?
El mercado de la IA todavía está evolucionando y existen riesgos inherentes. Es fundamental realizar una investigación exhaustiva antes de invertir en inteligencia artificial y comprender nuestra tolerancia al riesgo.
Considera factores como la salud financiera de las empresas, sus aplicaciones específicas de IA y el potencial de crecimiento general del sector de IA.
En este momento, las bolsas de valores NYSE y NASDAQ se hallan en máximos, en buena parte gracias al avance de la IA. No obstante, no son pocas las voces que consideran que muchas acciones se encuentran sobrevaloradas y se preguntan cuánto más podrá subir el mercado.
Sin duda, la IA es una tecnología transformadora con potencial para revolucionar numerosas industrias.
Al invertir en inteligencia artificial, nos estamos posicionando para participar en el futuro de la innovación. Lo recomendable es estructurar una cartera bien diversificada que incorpore la exposición a la IA junto con otras clases de activos.
Esto puede ser una herramienta muy poderosa para la creación de riqueza a largo plazo.
