A corto plazo puede ser que no se perciba la recuperación que estamos viviendo en México, pero las reformas de Enrique Peña Nieto van en la buena dirección y darán como resultado una nación más fuerte y grande de la que había antes.
México puede incrementar el bienestar de sus ciudadanos si incrementa los ingresos públicos y si ese dinero se distribuye de una manera equitativa y teniendo en cuenta las necesidades de la población.
Tampoco nos debemos comparar con Bélgica, pero no estaría mal que subieran la carga fiscal, si ello implicará una mejora de servicios básicos.
Es obvio que la Bolsa es un fiel reflejo de como camina la economía, y aunque se ha revisado las expectativas de crecimiento, México crecerá por encima del 3% en este 2014, y mientras eso se cumpla, lo demás irá bien.
Las previsiones de crecimiento de México se han modificado a la baja y puede ser que eso repercuta en la evolución del peso y del IPC y se produzcan caídas a lo largo de abril.
La evolución de la Bolsa marca la salud de la economía y si la Bolsa de México sube, quiere decir que los inversores confían en la recuperación del país y en su economía.
Las perspectivas económicas para México son esperanzadoras pero hay que seguir trabajando por recuperar la estabilidad económica de antaño, generar más empleo e incrementar la seguridad en todas las ciudades mexicanas.