La situación de la energía en Brasil está mejorando recientemente gracias a la pobre actividad y a un volumen de lluvia por encima de la media. A pesar de estos desarrollos recientes y la perspectiva de avance moderado de El Niño (razón por la cual ha llovido más en Brasil), la situación energética está lejos de ser sostenible. El nivel de agua en reservas está actualmente al 35.7%, nivel cerca del mínimo marcado en mayo de 2001 con 34.8%. El acontecimiento de El Niño puede ayudar a evitar un anuncio de racionamiento este año, pero el punto de partida es un mínimo histórico en términos de nivel de agua en los embalses. Situación energética seguirá siendo un problema en los próximos años.