Los mercados financieros pueden ser abordados con distintas estrategias según los instrumentos que prefiera operar cada inversor, ya que se puede contar con un conocimiento más especializado o tener preferencia por alguna herramienta de análisis en particular. Pero el objetivo final es ser rentable: generar un retorno y maximizar los beneficios disminuyendo los riesgos asumidos.
¿Qué objetivo tengo al invertir o hacer trading?
Superar la inflación, adelantarse al mercado y en el camino obtener ganancias son algunas de las premisas que se plantean al momento de realizar una inversión o empezar a operar con trading. Al evaluar por cuál de estas opciones decantarse, hay una serie de aspectos a tomar en cuenta, como pueden ser el enfoque para realizar las transacciones en el mercado, los beneficios y las desventajas asociadas a cada opción. Ningún instrumento financiero tiene la capacidad de garantizar un rendimiento determinado, pero es factible acotar los resultados en función del conocimiento del mercado en combinación con las herramientas de análisis más adecuadas.
En este artículo contrastaremos los conceptos de inversión y trading, ya que si bien ambos enfoques son de utilidad para la obtención de riqueza a través de su operación en el mercado, las similitudes terminan ahí.
Inversión
Una inversión representa una promesa de capital a un activo para obtener un rendimiento positivo en un punto indefinido en el futuro. Dicho de otra forma, es una estrategia de "comprar y mantener" con la intención de obtener una ganancia futura. Las inversiones pueden tardar desde días hasta años en madurar, y los inversores aceptan esa condición. La mayoría de los inversores ejecutan transacciones solo unas pocas veces al año, basando sus decisiones en un análisis profundo de los diversos factores que inciden en su inversión. Los retornos sobre el capital pueden variar de acuerdo al plazo, las condiciones, el perfil y las expectativas de los inversores.
Las inversiones en Colombia se pueden realizar a través de un broker y pueden ser directas o indirectas, públicas o privadas, y suelen presentar diferentes niveles de riesgo y temporalidad. Generalmente, se asocia en el vocabulario bursátil la palabra inversor para alguien con enfoque de medio y largo plazo en activos tradicionales: acciones, ETFs, fondos de inversión, inmuebles.
El trading
Al operar especulativamente sobre instrumentos financieros con el objetivo de obtener un beneficio en el mercado de valores se le denomina trading. Es el proceso de compra-venta de valores en los mercados cotizados, también conocido como comercio bursátil, así como a sus participantes traders. Trabajando en un plazo más corto del que eligen los inversores, los traders se centran en generar "un flujo de caja inmediato y medianamente regular" a través de la exposición diaria al riesgo de capital. Los operadores buscan obtener el máximo rendimiento en sesiones de negociación individuales.
Si bien los operadores pueden seleccionar algunos de los valores que eligen los inversores, también pueden preferir productos derivados. Las fluctuaciones de precios permiten a los operadores capitalizar las ganancias a corto plazo en operaciones que pueden tomar solo unos cuantos segundos, posibilitando realizar cientos de transacciones en una sola sesión de negociación. Además, suelen realizar estos movimientos aplicando diferentes niveles de apalancamiento.
Trading vs inversión
Identificar las diferencias entre el trading y la inversión no representa un desafío para los defensores de cada opción. Saben cuál enfoque se adapta a sus preferencias, así como las ventajas y desventajas de cada uno. Evalúan los aspectos positivos y negativos a medida que encuentran formas de hacer que su dinero trabaje para ellos. Al evaluar los posibles beneficios, estos factores contribuyen a la toma de decisiones:
- El interés: Los activos pueden volverse más valiosos con el tiempo, ya que los ingresos de las tasas de interés permiten una reinversión que aumenta la "valoración de los instrumentos de deuda". Aunque el interés compuesto es un concepto abstracto más aplicable al cobro de algún tipo de financiamiento, existen esquemas de inversión que dependiendo de las circunstancias del mercado pueden verse beneficiados por algunos periodos al generar flujos positivos.
- Responsabilidad limitada a corto plazo: Al eliminar los mercados difíciles en cartera en lugar de reaccionar a la volatilidad periódica, los inversores limitan el riesgo con productos que devuelven valor a una inversión a lo largo del tiempo. Por ejemplo, en tiempos de alta inflación, elevadas tasas de interés y volatilidad en el mercado, es factible invertir en renta fija, garantizando el plazo y rendimiento.
- Costos de transacción y obligaciones fiscales: Los inversores deben considerar los costos de transacción asociados al tipo de instrumento que operan, ya sea por determinaciones del sector financiero o de la institución que haga el papel de intermediación entre quien invierte y el mercado. El aspecto fiscal es otra cuestión que nunca se debe dejar de lado, obtener rendimientos siempre generará una obligación de contribución al gobierno, y se deberá estar al pendiente del cumplimiento de estas, ya que la omisión de las mismas conlleva consecuencias jurídicas.
- Ganancias de capital inesperadas: Las inversiones pueden aumentar con el tiempo con divisiones de acciones (split) o pagos de dividendos no anticipados. Es importante conocer las condiciones de operación de toda inversión potencial, ya que algunos instrumentos están sujetos a restricciones. Por ejemplo, en algunos casos los inversionistas pueden no tener acceso al capital disponible hasta que se produzca la liquidación del producto que operan. También se debe considerar que nunca se está exento de tener una minusvalía, ya que en el mercado no “todos los factores se mantienen constantes”.
En definitiva, ser trader o decantarse por invertir es una decisión personal que obedece más a preferencias u otros motivos personales, ya que en ambas posiciones se puede obtener beneficios. A continuación, te compartimos algunas características que te pueden dar una perspectiva más amplia sobre ambas opciones.
¿Por qué hacer trading en los mercados financieros?
- Las posiciones se abren y cierran fácilmente, evitando riesgos de un "colapso total del mercado" a través de una filosofía comercial activa.
- Existen coberturas y seguros para la protección de los fondos a través de instituciones reguladas.
- Una serie de operaciones positivas puede generar una reserva de fondos.
- Los operadores que utilizan el apalancamiento pueden arriesgar cantidades más pequeñas de capital para obtener ganancias.
¿Tiene riesgos hacer trading?
Aunque también se deben considerar los posibles riesgos y/o costos asociados:
- La exposición a volatilidades a corto plazo puede reducir severamente una cuenta comercial, sobre todo con apalancamiento.
- Las tarifas y comisiones pueden reducir la imagen de ganancias tanto del trader como del inversor.
- La responsabilidad fiscal sobre las ganancias de capital a corto plazo puede afectar el resultado financiero.
- Dependencia de la tecnología para internet y sistemas de información, en mayor medida para el trader, ya que suele operar en lapsos de tiempo muy cortos.
Los traders consideran que es una ventaja lograr liquidez abriendo y cerrando posiciones rápidamente, y evitan los riesgos de un "colapso total del mercado" a través de una filosofía comercial activa. La capacidad de salir de una posición indeseable rápidamente brinda protección contra los retiros de cuentas, y una "serie de operaciones positivas" puede generar una reserva de fondos. Los traders que utilizan el apalancamiento pueden arriesgar cantidades más pequeñas de capital para lograr el beneficio que desean, por ello los inversores deben controlar y tener en cuenta la gestión de riesgos al hacer trading.
Tomar las oportunidades en el momento indicado
El mercado de valores colombiano o mundial ofrece algunas pautas que se convierten en eslóganes fáciles de recordar, como "comprar barato y vender caro". El desempeño del mercado muestra que las inversiones valen más que el precio de compra en el largo plazo, es decir, de al menos 10 años. Cuando una inversión vale más que en un punto establecido inicialmente, debe retirarse con ganancias.
Un requisito de efectivo puede motivar a un inversor a liquidar un activo e invertir en otro lugar, una buena razón para vender. En algunos casos, un inversor puede querer equilibrar una cartera tomando ganancias a corto plazo en una acción que funcionó bien. El considerar los flujos netos descontados suele ser una operación obligada al determinar si la inversión ha de realizarse o no.
Centrarse en los precios de las acciones para obtener ganancias a largo plazo, es el eslogan que guía la decisión de vender acciones o comprarlas, sin embargo, la capacidad de identificar un precio bajo o alto depende de variables que presentan desafíos. Los indicadores técnicos, como el volumen comercial, pueden proporcionar alguna orientación, pero muchos expertos consideran que la práctica es arriesgada. Otras pautas incluyen informes de analistas y objetivos de precios de consenso que presentan un promedio de opiniones de todos los analistas. El conocimiento de cómo determinar cuándo el precio de una acción alcanza su punto más bajo proporciona uno de los aspectos más buscados de la inversión.
Inversor o Trader ¿qué elegimos?
Ser trader o inversor puede ser una experiencia gratificante y satisfactoria, ya que ofrece la posibilidad de obtener ingresos a través de operaciones en el mercado financiero. Con el conocimiento adecuado, los traders e inversores pueden desarrollar habilidades para realizar operaciones rentables en distintas clases de activos financieros. Sin embargo, también hay muchos riesgos involucrados en el trading y la inversión; por esta razón es importante que los traders e inversionistas sean conscientes de sus objetivos antes de abrir cualquier posición, que establezcan límites claramente definidos para su nivel de apalancamiento, que cuenten con educación continua acerca del mercado financiero en general, así como con los mecanismos de protección contra las mayores amenazas, incluyendo errores en los que podamos incurrir como resultado de nuestras decisiones.
Si se toman las precauciones necesarias al negociar e invertir, cualquiera de los dos caminos puede generar los rendimientos deseados, dejando la elección del estilo de inversión al criterio individual.